La catedral nueva de Salamanca se encuentra en la ciudad vieja de la misma población, la cual fue declarada Patrimonio de la Humanidad en 1988. Es una de las dos catedrales de la ciudad, la vieja esta justo al lado (pensaron en demolerla cuando se construyó la nueva, pero finalmente la dejaron).
Es la segunda más grande de España y fue construida entre los siglos XVI y XVIII, y mezcla estilos como el gótico tardío, renacentista y barroco.
La planta es rectangular, con tres naves más dos colaterales a diferentes alturas, lo que permite una gran iluminación del interior a través de las vidrieras.
La torre cimborrio es de estilo barroco, y a modo de curiosidad tuvo que ser reconstruida después del terremoto de Lisboa de 1755, así como la torre campanario, que quedo ligeramente ladeada.
Como decoración exterior destacan sus pináculos junto con los arbotantes que ayudan a soportar el peso de las bóvedas de crucería, así como los contrafuertes.
Las tres fachadas principales cuentan con una decoración y una disposición renacentista, siendo la más conocida aunque no la más importante la que se sitúa en la nave principal (en la foto) por el relieve de un astronauta modificado en 1992. Aún siendo en su mayoría renacentista, los arcos apuntados destacan del periodo gótico.
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